lunes, 9 de mayo de 2016

Embarazo psicológico

Como su propio nombre indica el embarazo psicológico no corresponde a un embarazo real sino que es fruto de un trastorno psicológico que puede llegar a ocurrir por diferentes causas.

Los síntomas de un embarazo psicológico son similares a los de uno verdadero. Por ello es más fácil el autoconvencimiento de lo que está ocurriendo. Lo habitual en este tipo de procesos es el crecimiento de pechos, la falta de menstruación, y el más evidente, el crecimiento del vientre. También se aprecia la falta de sueño el oscurecimiento de la piel o la falta de apetito.

Las principales causas por las que esto ocurre son dos. En primer lugar el temor a tener hijos, en segundo, el gran deseo de tenerlos. En muchos casos las condiciones fisicas de algún miembro de la pareja no responden a lo básico para concebir un niño. Los procesos suelen ser de larga duración además de intentar vías como la reproducción asistida.

Los casos de embarazo psicológico no requieren ayuda de un ginecologo, si de un psicológo que acceda al origen del problema.

 La doctora Quero, una prestigiosa psicóloga de la Universidad de Mexico considera en sus estudios que estos casos suelen darse en mujeres que no expresan verbalmente su temor o su deseo y el cuerpo lo hace de manera voluntaria.

Esto puede darse también en las mujeres menopausicas que no aceptan su infertilidad y se convencen de lo contrario.